Alguno de los visitantes de este cafetín cinéfilo que allá por el año setenta y cinco contara con edad suficiente notará, nada más acabar de leer el título de la entrada, que existe algo en ella que le suena a conocido. Puede que solo se trate de un rumor imperceptible al que no acaban de dotar de significado. Sin saber el porqué hay algo que se remueve en el fondo de la memoria.
Si cambio el nombre escrito,
Hogan, por este otro,
T.J., aparte de algún que otro arqueo de cejas seguro que más de uno empezará a escuchar el
tema musical compuesto por
Barry De Vorzon (confieso que este último dato, el del compositor, lo acabo de conocer gracias a IMDB, por intermediación de el señor Pond). Y hasta puede que, quien más y quien menos, llegue a visualizar como unos uniformados fuertemente armados suben a la carrera a un furgón
Chevrolet Grumman color azul marino oscuro, en la serie de televisión "
Los Hombres de Harrelson".

Mas no han de temer que quien escribe haya sufrido un leve ataque de nostalgia infantil (cosa bastante difícil pues, aunque no negaré que seguía la serie, por aquella época solo contaba con [...] añitos; edad del todo punto insuficiente como para albergar los recuerdos necesarios para alimentar a la nostalgia).
La realidad es que con la parrafada anterior solo pretendía introducir de manera adecuada un
sketch de "
El Show de T.J.", digoooo, de "
El Show de Paul Hogan". Un programa de humor también emitido por la televisión española aunque unos años más tarde, a principios de los ochenta. Antes de que
Paul Hogan se hiciera famoso por su caracterización como "
Cocodrilo Dundee", sin olvidarse de su
hilarante discurso en el transcurso de la 59 Edición de los Oscar, edición que presentó junto a
Chevy Chase y
Goldie Hawn.
En fin, y resumo, que me apetecía echarme unas risas con el humor del australiano.
"El Show de Paul Hogan"