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miércoles, 22 de octubre de 2008

AQUELLOS SABLISTAS DE ANTAÑO

Para los habitantes de un pequeño reino enclavado en el extremo oriental de Centroeuropa, el día no puede ser más grato. Se trata de la víspera de la coronación del príncipe Rudolf como nuevo rey de Ruritania. A Strelsau, la capital, acuden súbditos procedentes de todo el país, deseosos de ser partícipes del magno evento aunque sólo sea como testigos. Entre los muchos que llegan a la engalanada ciudad destaca un extranjero, inglés para más señas, y que responde al nombre de Arthur Rassendyll. Es éste un ex-oficial de la Guardia de Su Graciosa Majestad, licenciado del servicio desde algún tiempo antes tras haber alcanzado el grado de mayor. Sin embargo al contrario que el resto de visitantes su intención última no se haya para nada relacionada con los fastos derivados del ceremonial. Su única pretensión es la de dedicar sus días de estancia en el pequeño estado a dar rienda suelta a una de sus grandes aficiones: la pesca.

Mientras se encuentra practicando su afición a la orilla de un río próximo a la capital es sorprendido por una patrulla de la guardia personal del príncipe. Para mayor sorpresa del caballero inglés sus integrantes se muestran perplejos por su presencia allí, solo y pescando tranquilamente. Semejante reacción no es para menos puesto que Arthur resulta ser la viva imagen del futuro soberano.

Así da comienzo la historia narrada por Anthony Hope (1863-1933) en su libro "El Prisionero de Zenda", publicado allá por el año 1894. Una novela que pronto gozaría del favor del público por lo que el autor terminó por escribir cuatro años después una segunda parte, "Rupert de Hentzau".


Una novela, la primera, que hoy en día sigue gozando de una gran fama; con respecto a la segunda desde que me enteré de su existencia (de eso hace ya unos años) intenté hacerme con un ejemplar, aunque sin éxito. Al parecer no se haya publicada en España porque en el ISBN no consta ninguna entrada.



La industria cinematográfica no fue ajena a la oportunidad de recrear en el celuloide una historia de aventuras como ésta, repleta de complots, amoríos, malvados y traidores, luchas e intriga, por lo que ya en el año 1913 vio la luz una primera versión a la que pronto seguirían dos más, una en 1915 y la otra en 1922. Precisamente fue ésta última versión, todavía muda, la que más éxito cosechó de las tres. No por nada al frente del reparto se encontraba el galán Ramón Novarro, quien tres años después interpretaría a Judá Ben-Hur en la película del mismo título.

Ramón Novarro

Una época ésta en la que hacían furor las películas de aventuras filmadas a mayor gloria de Douglas Fairbanks ("La Marca del Zorro", El Ladrón de Bagdad, Los Tres Mosqueteros, Robin Hood,...).

Sin embargo de todas las realizadas mi preferida sigue siendo la versión del año 1937: Ronald Colman, Madelaine Carroll, Douglas Fairbanks Jr., Raymond Massey, Mary Astor, C. Aubrey Smith, David Niven,... Aunque no negaré que la recreación del villano Rupert de Hentzau a cargo de James Mason también resulta memorable.

Bueno, y si se me permite la debilidad, el episodio-homenaje a cargo de Blake Edwards, un auténtico forofo de esta película, en su filme "La Carrera del Siglo" ("The Great Race", Blake Edwards, 1965).


En primer lugar les ofrezco la versión del año 1937 del duelo final entre Rudolf Rassendyll (Ronald Colman) y Rupert de Hentzau (Douglas Fairbanks Jr.) en "El Prisionero de Zenda" ("The Prisoner of Zenda", John Cromwell, 1937), una producción de David O. Selznick.





En versión original





A continuación la escena del duelo en la versión del año 1952, en la que se enfrentan Stewart Granger y James Mason. "El Prisionero de Zenda" ("The Prisoner of Zenda", Richard Thorpe, 1952). Una producción de la Metro Goldwyn Mayer.





En versión original





Personalmente yo me quedo con la versión del año 1937, ¿y ustedes?

Un último apunte. Fue precisamente la conclusión inesperada de este duelo la que sirvió para terminar mi enconada enemistad con el tratamiento del “malvado" en novelas y películas, un sentimiento madurado durante mi infancia y adolescencia. Sin embargo el tiempo me hizo ver cuán errado estaba. Se explicaba por la intención del autor, Hope, de escribir una segunda parte, “Rupert de Hentzau”.


Ahora bien lo que no se me ha quitado todavía es la afición por el cine de espadachines.

6 comentarios:

Rosenrod dijo...

Pues tiene usted todo mi apoyo: yo también me quedo con la posterior.

Un saludo!

G. K. Dexter dijo...

Rosenrod.

Desde mi humilde cafetín cinéfilo quiero expresarle mi agradecimiento por su apoyo. Ya sólo faltan ... firmas más.

Un saludo cinéfilo.

P.D.: acabo de leer su post sobre "Los Tres Entierros...", ya es el segundo post que leo acerca de esta película y ... ¡aún no la he conseguido!
¿Será una señal?

Anónimo dijo...

Alberto Q.
www.lacoctelera.com/traslaspuertas

Si consigue ud. encontrar esa segunda novela de HOPE con la segunda parte de las aventuras, avise por aquí!!!!

Saludos señor.

G. K. Dexter dijo...

Alberto, primero te pediría que apeemos el tratamiento pues casi somos de ls misma quinta.
No te preocupes, pues si mis desvelos por hallar esa segunda novela dan su fruto a buen seguro que serás uno de los primeros en saberlo. Aunque sólo sea por los gritos de júbilo que voy a proferir...

Un saludo cinéfilo desde Strelsau (Ruritania).

P.D.: casi parecemos un par de personajes salidos de una novela de Kipling; y es que ese señor me ha llegado al alma.
Cuídese (cuídate) Alberto.

caveat emptorium dijo...

Hola,
Mi cariño está repartido entre las dos primeras versiones sonoras de "El prisionero...", porque, podría decirse abundando en el tema de los dobles, los jefazos de la MGM dieron orden tajante de seguir en lo posible la película del 37 dando el toque de la casa allá donde se creyera necesario.

Por lo tanto, es muy difícil elegir entre las dos, y James Mason lo complica todavía más... pero, si hay que votar, me apunto a la primera.

Y, sí, yo también busco "Rupert de Hentzau" por doquier, pero me temo que habrá que agenciarse alguna edición en anglosajón (o en Ruritano)...
Saludos

G. K. Dexter dijo...

Caveat.
Cierto que James Mason lo pone muy difícil pero después de ver la de 1937... Y que conste que la primera que yo vi, no una ni dos veces, fue la de Granger y Mason.
Será cosa de la atracción de lo "clásico" o vaya a saber el qué.

El caso es que sigue la goleada... (y sin que aparezca por ninguna parte el nombre de Gary Cooper; xxxD).

P.D.: respecto a "Rupert de Hentzau" me he dado cuenta de que por alguna parte, en algún disco duro, CD o lápiz USB debo tener una versión en PDF, pero en inglés (y el poco que sé está muy oxidado). A ver si rebusco un poco más; ya llevo unos días en ello, cuando "mi Alzheimer" me dejó caer en la cuenta de la existencia de tal archivo. Si es que uno guarda tantos papelotes que al final acabas por no saber lo que tienes.