Un espacio destinado a charlar acerca del cine, saboreando una taza de café (puede que más), sentados en torno a una mesa. Por el simple gusto de hablar por hablar acerca de una pasión compartida por una reducida infinidad, así nomás como son estas cosas.

Bienvenidos a mi hogar. Entren libremente. Pasen sin temor. ¡Y dejen en él un poco de la felicidad que traen consigo!

sábado, 30 de mayo de 2009

A LOS SONES PIRATAS





What shall we do with a drunken sailor”- Clancy Brothers and Tommy Makem






Fifteen Men On A Dead Man's Chest


"La Canción del Pirata" - Tierra Santa (versión musicada a ritmo de rock del poema de José de Espronceda)


4 comentarios:

Rumbonín dijo...

The Clancy Brothers!!!!

Tú si que lo entiendes Dexter!!!

G. K. Dexter dijo...

Rumbonín.

Te confieso que los descubrí mientras buscaba música apropiada (con aires corsarios, filibusteros y piratas). Y a fuer de sincero que debo declarar que es un gran descubrimiento.
Yo quizás entienda, como dices, mas tú sí que sabes.

Un saludote cinéfilo.

BLAS dijo...

Hola Dexter!

¡Cómo he disfrutado este post! Gracias a tí he descubierto a The Clancy Brothers, y me están encantando, es la clase de ritmo celta que puedo estar escuchando horas.
La segunda la conocía, jajajaja, es todo un clásico pirateril!
La tercera no la conocía, es decir, la versión rockera de Espronceda, curiosamente, cuando en el colegio una vez nos dijeron que nos aprendiéramos un poema para exponerlo en clase, fué éste el elegido por mí, ya que, aun a pesar de su extensión, transmitía un poder y una libertad que siempre me han llamado la atención. Cosa que desgraciadamente no suele pasarme con la poesía en general.

Saludos!!

G. K. Dexter dijo...

Blas.

Uno de los placeres de disponer de un cafetín es que puedo compartir lo que voy descubriendo. Sin lugar a dudas.

Lo de aprenderse "La Canción del Pirata" tiene su mérito, y como dices, también una recompensa.

Un saludo cinéfilo.

P.D.: anécdota por anécdota (aunque la mía sea ajena). Allá por cuarto de EGB un compañero volvió de vacaciones y de repente se arrancó a recitar el poema de Espronceda, de proa a popa y de babor a estribor. Cuando la profesora le preguntó el motivo él sólo dijo una cosa: me aburría y me llamó la atención... Tardé años en darme cuenta de a qué se refería (seguramente le ocurrió lo mismo que a ti).