“En cuanto a mí, pensé que, si en algún momento un hombre se halla en la necesidad de convertirse en un villano, es preferible que sea un villano agradable, y Rupert Hentzau me resultaba infinitamente más agradable que sus dos compañeros, con sus caras largas y sus ojos mezquinos. A mi modo de ver, el pecado no es más grave cuando se comete à la mode y con estilo”.
“El Prisionero de Zenda”, Anthony Hope.
2 comentarios:
Yo no conozco esta versión del Prisionero de Zenda, sino la de 1952, con Deborah Kerr y Stewart Granger.
Respecto a Douglas Fairbanks Jr., siempre he creído que su carisma superaba a cualquiera allá donde fuera, tenía algo especial. Y desde luego era el malo por excelencia...
Saludos!!
Blas.
Yo tuve ocasión de ver ésta por televisión, a unas horas más propias para el dormir, cuando por televisión aún proyectaban esta clase de películas. Hasta entonces sólo había tenido ocasión de disfrutar la versión con Granger y Mason. Y sí, aunque Mason nos legó un villano digno de su arte Douglas F. Jr. sigue pareciéndome un crótalo que luce alamares y entorchados.
Un saludo cinéfilo.
P.D.: en la biblioteka están las dos novelas: "El Prisionero..." y "Rupert de Hentzau". Merece la pena porque la segunda es prácticamente imposible encontrarla en nuestro país y la primera, la primera ya hace unos años que sus ediciones están agotadas.
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